Complejidad Humana - Adaptación

Sintiendo la placidez al despertar el sábado en la mañana, me detuve a pensar por un instante y comprendí cuanta razón tenia “alguien” al expresar su postura ante la inexorable "Complejidad Humana de la adaptación". Al menos a mi no me cabe duda alguna de cuan receptivos somos ante una eventualidad, persona o circunstancia, y es oportuno señalar que cuando nos interesa algo, sin fingir, sin adoptar camuflaje alguno o seguir los pasos del preámbulo de conquista en donde soportamos lo irracional para demostrar carisma, formamos parte del circulo y convicciones objetivas sin doblegar nuestra personalidad. La misma vida es un proceso de adaptación constante y las generaciones pasadas del hombre, sus mitos, legado envuelto en papiros y arte rupestre, nos han dado una gran lección de este tema sin contradicción alguna. Si vamos a un país de clima nevado, lo más prudente es ir preparado con todo el ajuar para soportar el frio insolente que congela tus pestañas… pero, algunos sucesos por los que atravesamos, son tan fáciles de asimilar? Contamos siempre con las herramientas necesarias para combatir cada incidencia ante tal proceso? Qué tiempo necesitamos para acoplarnos completamente? Cuáles factores se suman a nuestro favor ante la adaptación forzada o inminente de diferentes circunstancias de nuestra vida?

Cuando afrontamos el proceso de adaptación, todo es más fácil si contamos con la receptividad y apoyo de los involucrados en esta etapa “aparentemente sencilla”. A todos en un momento alguno nos produce desconcierto, flojera, ansiedad, preocupación y desmotivación lo incierto, lo desconocido. Rendirse no siempre es una opción voluntaria, pero si obligatoria cuando todos los puntos parecen presentar poca probabilidad de salir victorioso ante tal persistencia. A donde va a parar el optimismo extremo y la fe desnuda ante la incomprensión? Despertamos un día convertidos en el paisaje de una pintura de Salvador Dalí colgando de algún arbusto sin hojas? Echamos a volar la imaginación pensando que “mañana” escucharemos la respuesta anhelada o las palabras silenciadas por unos labios que al besar dejan sus rastros de cianuro en el corazón? Es difícil cruzar el puente del entendimiento, pisotear nuestros fantasmas y pensar un poco en quien nos muestra su corazón sin mentiras y dispuesto amar?

Volví a recostar mi cabeza en la almohada de cuello azul índigo sin pesar alguno, sin proponerme despertar ante la alarma relajante insultando mi cordura … dejé escapar una leve sonrisa al tener mi conciencia en paz, recordando cuan difícil es entender y explicar lo inexplicable … tal vez sea parte de la misma adaptación, quien sabe …