El viernes por la noche compartí un encuentro con mis mejores amigos, compañeros de trabajo y algunos allegados en el intercambio de regalos con motivo de navidad que hacemos todos los años. En las últimas entregas, mi ex compañera de labores y amiga Amry pasaba apenas a dejar su regalo y salía con tanta prisa que no teníamos oportunidad de compartir junto a ella tiempo suficiente para realizar el festejo, al ver su actitud nada a drede, me acordaba la hora cruel en que Cenicienta debía llegar a casa antes de perder su encanto, a diferencia que mi amiga por razones obvias, debía salir corriendo apenas llegaba. Este año, le expresé cuan importante era su presencia y lo bien que la pasamos junto a ella, le reiteré mis palabras en un correo electrónico semanas antes del encuentro … Ahí estaba ella, llegando puntual como siempre, la primera, sin prisa, con su sin igual sonrisa y su rubia cabellera no tan lacia esta vez. Estuvo hasta que se marchó el último invitado de madrugada y personalmente sentí una alegría enorme esa noche compartiendo y reviviendo momentos pasados llenos de sonrisas junto a ella. Ves que siempre hay una segunda oportunidad para reivindicarse? me dijo mientras compartíamos asiento en el mismo mueble. Asenté con la cabeza un gesto afirmativo sin decir palabra alguna. Dicen que al día tenemos 1480 oportunidades para enmendar y reparar el daño causado con una simple palabra o un acto noble como ser sincero. Estoy totalmente en contra del “Honor profesado a la verdad” … la misma no necesita alardearse y sólo los mentirosos piensan que al recurrir a ella, han aportado la cuota máxima para la paz mundial, dejando mal paradas a las torpes concursantes de los certámenes de belleza. Pienso que todos nos merecemos un voto de confianza, una segunda oportunidad, más cuando el rastro genético de nuestra etiqueta remolca secuelas familiares imborrables y no logramos superarlas, somos como un agujero negro en el firmamento: arrastrando todo a su paso a un portal desconocido. Lavarse las manos es válido cuando el cambio viene del corazón y sales de la red mortal en que las osadías te han atrapado. Duplicando el número, diría que son 2960 oportunidades diarias que tenemos para comprender que, el mundo comienza a cambiar justo cuando TU decides ser el primero en la lista …
domingo, 20 de diciembre de 2009
Un voto de Confianza !!!
Publicado por
VALENTIN
en
11:18:00 p. m.
Etiquetas:
historia pasada.,
la ultima cena,
no more lies
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6 comentarios:
Valentín, acertadisima tu entrada y que frase tan más verdadera: "el mundo comienza a cambiar justo cuando TU decides ser el primero en la lista"
besos!!!
saludos, tengo tiempo que no se nada de ti...te cuidas, buen post como siempre
ES bueno ser importante en la lista de alguna amistad. Y como dices: "tener el poder de ser los primeros en cambiarnos mútuamente nuestro entorno."
Hace mucho que no veo a mis verdaderos amigos...Y no poder aprovechar una de las fuentes de felicidad más acertadas desde los científicos hasta los incultos....
...la amistad.
sabes una de las cosas que mas me agradan de ti, (escribiendo), es que sabes colocar frases finales que te hacen pensar.
cuidate mucho, un abrazo.:)
Confianza?..mmh!
Me cuesta mucho, creer y formarla. Tal vez, sea yo el error o mi forma de pensar.
Siempre he dicho que vivo en un mundo equivocado, y con personas equivocadas...
Un abrazo!!
Valentin te lo habran dicho varias veces, pero tenes un blog MUY bueno.
besotes (;
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