Unplugged: Heavenly Justice ...

... Trozos de piel rasgados por el cincel despiadado robando la inocencia de sueños color lila y unicornios.

Manos asesinas asquerosas que acariciaban con su nauseabundo tacto la flor de una juventud exquisita como el azahar en su primera cosecha…

Miradas pendencieras despavoridas, sin voces, con antifaces y crueldad parados frente a la puerta del perverso “Cerberus” disfrazado de ángel, con alas, con su sínica sonrisa de cándida dentadura perfecta…

Probablemente ella soñó danzar un vals en su fiesta de quinceañera, con el candor dorado de su mundo feliz, no con fecundar su vientre del malvado villano que seducía sus encantos cual bastardo en la noche, sin luna, como hojas secas ante el viento indeleble, como estrofas siniestras de la divina comedia, con arrogancia y aplausos de bufones de corte sin coronas.

No hubo tiempo para letanía o plegaria postrada frente al cristo de madera que afligido conocía su corazón, sin necesidad de presenciar sus huérfanas lágrimas arrastrando la piedad de un calvario injusto, con la espalda desierta … Por el momento, la oscuridad extenuaba su banquete con pocos invitados y la sentencia mortal de un precio a pagar con la reverencia despiadada en sus labios por el amargo aliño perenne de huellas con sendero de algunas monedas y sal. Y qué harás niña cuándo muestres tus manos sucias ante el creador? …