... Con Miel de abeja !!!

Tío, usted si es empalagoso, quiero irme a casa.! fueron las palabras de mi ahijado y sobrino Kuss. Reí hasta más no poder y entendí que los cinco minutos que había esperado por mí para llevarle a casa de mi hermana mientras saludaba mi cuñada, eran para él una eternidad. Sus cortos años y su espontaneidad dejaron aflorar un comentario que me provocaba risa y me hacía pensar un poco.

A ver a ver! me preguntaba! Empálagoso? Wow! y vaya que tenía varias definiciones esta palabra o algunos le daban otra connotación no tan dulce. Me despedí efusivamente de mi cuñada y procedí a llevar a kuss a su casa mientras seguía riendo.

Me encanta la forma en que sin irrespetarme, mis sobrinos son sinceros conmigo y pueden expresarse libremente siempre y cuando no crucen la línea del irrespeto. Entré a casa de mi hermana sujetando su flacucha, débil y tibia manito. Minutos más tarde, llamaba a Kuss a compartirt conmigo un picnic sin salir de casa. Galletas, jugo y la receta secreta.

Kuss no podía esperar el momento en que empezaramos a disfrutar nuestra merienda de la tarde. El avioncito, el avioncito !!! le dije a mi ahijado mientras tragaba el contenido de la cuchara; hizo una mueca y procedí a preguntarle: a ver a que sabía: "Muy dulce tío" "Agua!" fueron sus palabras... antes de dirigirme al refrigerador, le dije: Crees ahora después de tomar esa cucharada de miel, que soy empalagoso? ... hizo un gesto evidente que pude entender perfectamente como un NO. Le expliqué el significado de empalagar y le hice saber que la cucharada de miel, era un ejemplo de lo que significaba este termino, hablándole tiernamente, mientras lo abrazaba con mucho cariño.

Kuss terminó gozándose el picnic y lléndose a la cama mucho más temprano por el sueño que le produjo la miel. ( y mi hermana feliz)... Ahora soy yo quien bromea con el pequeño cuando lo veo agobiando a sus primitos con su largo parlotear. "muchacho, tu si eres empalagoso, le digo, como si hiciera eco de su frase mencionada meses atrás" ... me mira y con su peculiar risa compruebo que mi lección de vida a sus cortos años, me acercan más a su confianza futura, fortaleciendo los lazos de cariño que siento por él. (ahora que lo recuerdo, a mí tampoco me gusta la miel de abeja ... jajajaja)