El sábado pasado me tocó ser niñero de tiempo completo. Mis tres sobrinos vendrían a mi casa a visitarme, mi hermana aprovecharía para ir al dentista mientras yo cuidaría de ellos y aunque entiendo que sus edades no son para estar en vigilia constante y teniendo en cuenta que se portan bien dentro de sus parámetros, trato de no estresarme, sino más bien disfrutar de su presencia. Vaya Sorpresa, la cantidad de niños fue triplicada con edades adolescentes y un pequeño de 5 años…. Ya saben lo que dicen: números pares se suman.
No bien llevaban una hora de su llegada cuando la vecina de abajo subió muy sofocada y gritando con cierto sosiego: “Vecino, vecino, en el techo de la azotea hay un niño cabeza abajo colgando, corra, para que no se caiga”… Si mi dolor de cabeza del día anterior había desaparecido a base de calmantes para la migraña, repentinamente me invadió más por el coraje que por el susto (y para ser honesto, la combinación de ambas cosas fue desagradable) Cuando el padre pasó a recogerlo a los pocos minutos de haberlo mi hermana dejado en mi casa, el niño le hizo un berrinche para quedarse con sus primitos (mis sobrinos) y el padre, con todas las características de ejercer su función a carta cabal como digo a los de sus perfiles, (PADRES POR CORRESPONDENCIA) hizo un gesto dramático pasándose las manos varias veces por la cabeza y reiterándome que el pequeño travieso era todo un angelito. Bueno, le dije mientras rascaba mi barbilla (sinónimo de haberme agobiado al extremo) no tengo inconvenientes en quedarse en mi casa, pero soy muy estricto con el régimen disciplinario y con mis sobrinos tengo potestad de corregirlo, más con el suyo no podría hacerlo. El es tranquilo, volvía a enfatizarme (momento en el que yo recordaba las incidencias en que sus 3 hijos casi adolescentes eran protagonistas de hazañas pocos convencionales y avergonzadas en cada lugar donde iban)
Por qué padres por correspondencia? Se preguntarán muchos de ustedes. Es un título muy peculiar que uso para referirme a la irresponsabilidad que invade los rincones de nuestro país por el simple hecho de seguir los parámetros de una sociedad que te impulsa a los 24 a estar casado y tener hijos sin poseer muchas veces la suficiente madurez o preparación para formarlos en la vida con buenos valores. Los padres por correspondencia por lo general han encaminado con pasos gigantescos este mal en este siglo siendo permisivos a tal punto que los pequeños de la casa son apenas personas adultas de pequeña estatura y tienen acceso a muchas cosas del plano adulto, donde opinan a diestra y siniestra en nuestras conversaciones, antojadizamente hacen alarde de su control y manipulación en diferentes círculos (el colegio, otros adultos y se la lucen cuando llega visita a la casa)
Los buenos valores no deben los padres negociarlos nunca en la vida con sus hijos por más prisa que lleve el siglo. El respeto, la honestidad, la humildad y afecto sincero son y deben ser innegociables. Cuando los mismos no son inculcados dentro del hogar como zapata que construye los cimientos de una vida adulta más adelante, no debemos esperar un individuo bien formado y seguramente seguirá transmitiendo su cadena a los suyos. En mi familia el régimen de disciplina impera, mis padres exigían un respeto y los valores antes mencionados sin importar que cada uno tuviera un temperamento diferente. Mi madre era especialista hablándonos con la mirada y nosotros descifrando el significado de cada una de ellas sin la necesidad de que expresara palabra alguna.
Cuanto hay que hablarle a los niños de hoy día, uffff! Y tu los miras una y otra vez, les habla, le dices las cosas con amor y ocasionalmente terminas exhausto, producto de la crianza de los padres por correspondencia, los mismos que al parecer optan por encargar en un catalogo las cláusulas de formación disciplinarias de sus hijos o en el mayor de los casos, le arrojan a la sociedad a esos inquietos infantiles. Estos padres inconcientes, con poco carácter, exigen (atención educadores) que los profesores y maestros de las aulas formen a sus hijos… (Yo no entiendo) al menos estoy seguro de que en los colegios y escuelas se educan los niños, la formación elemental se aplica en el hogar. Los padres por correspondencias son cada vez más notorios apoyando a sus hijos en sus caprichos y permitiendo el irrespeto con todas las personas mayores de su alrededor.
Terminé tras la visita de mis sobrinos ese día súper cansado y en verdad no me cabía la menor duda de que ser padre es una tarea agotadora, constante, llena de paciencia y convivencia humana en donde al menos en mi caso, termino siempre aprendiendo mucho de los pequeños con cada ocurrencia … ahora que lo recuerdo, hoy vienen mis dos sobrinos consentidos a visitarme, necesito reponer energías .. ops!
No bien llevaban una hora de su llegada cuando la vecina de abajo subió muy sofocada y gritando con cierto sosiego: “Vecino, vecino, en el techo de la azotea hay un niño cabeza abajo colgando, corra, para que no se caiga”… Si mi dolor de cabeza del día anterior había desaparecido a base de calmantes para la migraña, repentinamente me invadió más por el coraje que por el susto (y para ser honesto, la combinación de ambas cosas fue desagradable) Cuando el padre pasó a recogerlo a los pocos minutos de haberlo mi hermana dejado en mi casa, el niño le hizo un berrinche para quedarse con sus primitos (mis sobrinos) y el padre, con todas las características de ejercer su función a carta cabal como digo a los de sus perfiles, (PADRES POR CORRESPONDENCIA) hizo un gesto dramático pasándose las manos varias veces por la cabeza y reiterándome que el pequeño travieso era todo un angelito. Bueno, le dije mientras rascaba mi barbilla (sinónimo de haberme agobiado al extremo) no tengo inconvenientes en quedarse en mi casa, pero soy muy estricto con el régimen disciplinario y con mis sobrinos tengo potestad de corregirlo, más con el suyo no podría hacerlo. El es tranquilo, volvía a enfatizarme (momento en el que yo recordaba las incidencias en que sus 3 hijos casi adolescentes eran protagonistas de hazañas pocos convencionales y avergonzadas en cada lugar donde iban)
Por qué padres por correspondencia? Se preguntarán muchos de ustedes. Es un título muy peculiar que uso para referirme a la irresponsabilidad que invade los rincones de nuestro país por el simple hecho de seguir los parámetros de una sociedad que te impulsa a los 24 a estar casado y tener hijos sin poseer muchas veces la suficiente madurez o preparación para formarlos en la vida con buenos valores. Los padres por correspondencia por lo general han encaminado con pasos gigantescos este mal en este siglo siendo permisivos a tal punto que los pequeños de la casa son apenas personas adultas de pequeña estatura y tienen acceso a muchas cosas del plano adulto, donde opinan a diestra y siniestra en nuestras conversaciones, antojadizamente hacen alarde de su control y manipulación en diferentes círculos (el colegio, otros adultos y se la lucen cuando llega visita a la casa)
Los buenos valores no deben los padres negociarlos nunca en la vida con sus hijos por más prisa que lleve el siglo. El respeto, la honestidad, la humildad y afecto sincero son y deben ser innegociables. Cuando los mismos no son inculcados dentro del hogar como zapata que construye los cimientos de una vida adulta más adelante, no debemos esperar un individuo bien formado y seguramente seguirá transmitiendo su cadena a los suyos. En mi familia el régimen de disciplina impera, mis padres exigían un respeto y los valores antes mencionados sin importar que cada uno tuviera un temperamento diferente. Mi madre era especialista hablándonos con la mirada y nosotros descifrando el significado de cada una de ellas sin la necesidad de que expresara palabra alguna.
Cuanto hay que hablarle a los niños de hoy día, uffff! Y tu los miras una y otra vez, les habla, le dices las cosas con amor y ocasionalmente terminas exhausto, producto de la crianza de los padres por correspondencia, los mismos que al parecer optan por encargar en un catalogo las cláusulas de formación disciplinarias de sus hijos o en el mayor de los casos, le arrojan a la sociedad a esos inquietos infantiles. Estos padres inconcientes, con poco carácter, exigen (atención educadores) que los profesores y maestros de las aulas formen a sus hijos… (Yo no entiendo) al menos estoy seguro de que en los colegios y escuelas se educan los niños, la formación elemental se aplica en el hogar. Los padres por correspondencias son cada vez más notorios apoyando a sus hijos en sus caprichos y permitiendo el irrespeto con todas las personas mayores de su alrededor.
Terminé tras la visita de mis sobrinos ese día súper cansado y en verdad no me cabía la menor duda de que ser padre es una tarea agotadora, constante, llena de paciencia y convivencia humana en donde al menos en mi caso, termino siempre aprendiendo mucho de los pequeños con cada ocurrencia … ahora que lo recuerdo, hoy vienen mis dos sobrinos consentidos a visitarme, necesito reponer energías .. ops!
7 comentarios:
Bueno te deseo SUERTE jejeje...!!!
Los niños de hoy en día son mucho más dificiles de lo que pudimos ser nosotros, y todo por la flojera de los padres al criarlos.
Yo en mi caso, no cuido sobrinos, pero si a muchos niñitos de diferentes edades ya que soy maestra. Y allí es donde me doy cuenta la bestialidad que cometen algunos "·padres" a la hora de enseñar a ser y hacer a sus retoños.
Quedamos pocos de los que creemos en la disciplina y los valores morales como fundamento de la familia y la sociedad.
Te envío un gran abrazo cariñoso.
jajaj todos eramos iguales faustina... me di cuenta cuando investigue $ algo...
rayos valentin que tortura.
Los peques de ahora, no son ni la sombra de lo que eramos nosotros. Claro habían niños inquietos, tal vez, por qué la disciplina era mas severa.
Una de esas puede ser, el resultado de nuestra sociedad. Como dices tu, cada día los padres no asumen su responsabilidades como tal, dejándole a los profesores, ciertos valores, que por ende no corresponden. El exceso de trabajo y el poco tiempo destinado a los niños, que por lo general están al cuidado de las "Nanas", por qué los padres, se encargan de los bienes materiales y de ciertas comodidades, para que a los hijos no les falte nada. Ese cariño es reemplazado con algún articulo material que ellos, vieron en algún lugar, y desean tener.
Como dice una conocida canción, ..."No basta, traerlos al mundo porque es obligatorio,
porque son la base del matrimonio
o porque te equivocaste en la cuenta"...(Franco de vita)
Un abrazo, valentin!!
Suerte, y sonrisas, son puros e inteligentes, hay que recordarlo, son pequeños Ángeles, que por su parte creen que nosotros somos Dios, o así debería ser.^`
Un abrazo
no tienes un poco de soga en tu casa mi querido Valentin?
estos carajitos d hoy son un lio, m imagino como sera el mundo en 10 anios.
Que decirte...los padres de hoy son mas complicados que los niños, exigen respeto a carta cabal pero no enseñan a sus hijos a respetar y lo mas lindo del caso es que si alguien (no importa si es un familiar), les llama la atencion a los niños se disgustan, sin darse cuenta que lo estan haciendo por su bien.
Es muy difícil criar y ahora lo entiendo, no porque sea madre, sino porque tengo una hermanita y por ser la mayor me toca parte de la crianza.
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